Este 2020 hemos vivido una situación inusual, con millones de personas encerradas en sus casas, lo que ha supuesto un cambio sustancial en la manera de trabajar y en las alternativas de ocio de las personas. Uno de los sectores que más ha crecido, ha sido el del videojuego.
Las medidas de confinamiento han restringido este año las actividades fuera de casa. Dentro de ella, los juegos en distintas plataformas – móvil, consolas y pcs- han sido la elección de millones de personas. Sólo en las dos últimas semanas de marzo, Twitch, la primera plataforma de streaming, creció más de un 30% con la suma de nuevos espectadores queriendo disfrutar de sus juegos favoritos.
Además del componente lúdico, los videojuegos también han servido como medida de alivio social, permitiendo jugar, chatear y conversar en compañía, además de generar interacciones con gente nueva, eliminando los problemas sanitarios del contacto real.
El panorama actual
Dentro de la población Europea, unos 250 millones de personas, más de la mitad de personas juega a videojuegos, ya sea de manera ocasional o frecuentemente. El reparto por géneros es de un 54% de hombres frente a un 46% de mujeres, y aunque las personas entre 15 y 20 años son las que más horas dedican a este hobby, el crecimiento ha aumentado significativamente en la franja de 25 a 34 años.
Desde hace algunos años también destaca el auge de los llamados e-sports: la profesionalización de las competiciones en juegos como League of Legends, mueve millones de euros y audiencias masivas en sus retransmisiones. Los jugadores profesionales se equiparan a atletas, con largas jornadas de entrenamientos y concentraciones antes de las competiciones. Sólo en 2019, los Esports tuvieron un valor a nivel mundial de mil 100 millones de dólares, 27% más que en el año anterior, según Reuters.
La industria del videojuego
Vista la situación actual, es entendible que el sector de los videojuegos sea uno de los que se vea reforzado tras la crisis del coronavirus. El aumento del consumo demandará más trabajadores cualificados en las áreas de creación, arte y programación de los mismos, y en los sectores adyacentes a él, como el publicitario.
Otra de las ventajas que tiene este sector es la posibilidad de instaurar el teletrabajo sin demasiadas dificultades, es más, parte del personal de distintos estudios trabaja habitualmente en remoto y está acostumbrado a realizar reuniones y revisiones de forma telemática.
Los nuevos puestos laborales que han ido surgiendo estos años – artistas 2D y 3D, animadores, programadores… – ahora tienen su propia formación reglada. Entre las distintas opciones educativas el Centro de Enseñanzas Profesionales Meatze ofrece un título superior oficial del Gobierno Vasco: el grado superior en Animaciones 3D, Juegos y Entornos Interactivos. En él enseñamos a nuestros alumnos las bases de varias disciplinas en creación de videojuegos, así como la generación de piezas gráficas, estáticas y animadas para publicidad.
En Meatze apostamos por una formación de futuro y nos sentimos orgullosos de ser uno de los primeros centros en ofrecer dicha especialidad. Si quieres más información sobre el ciclo, contacta con nosotros.